domingo, 11 de diciembre de 2011

EL EJERCICIO 2011 – MEMORIAS DEL DESCENSO


Pasen y disfruten los detalles del Movimiento Económico al 31-08-2011. Lean detalladamente cómo se “gana” un campeonato económico con River en el descenso. Un “revolucionario” galimatías contable aplicado para “sanear” a nuestro Club.




Podría empezar explayándome sobre el porqué no sirve ganar el campeonato económico si el costo es irnos al descenso. O insistir con lo que ya plantee, en este mismo estrado, cuando se trato el presupuesto 2011-2012 (y el reajuste del anterior) al afirmar que esta conducción se basa en los mismos criterios de la nefasta administración Aguilar (endeudamiento crediticio, venta de las joyas de inferiores, apoyatura económica en intermediarios o grupos empresariales amigos, aumentos desconsiderados en las cuotas sociales, etc.). O recordarles, en general, a todos los riverplatenses y, en particular, a los aguilaristas levantamanos de los años 2002 al 2009 que todos los ejercicios económicos de ese lamentable período tuvieron mentirosos superávits. Se dibujaba sin pudor alguno, por aquellos tiempos, y todo se sinceró (parcialmente, por supuesto) en el balance del año pasado donde el ex fiscalizador Renzi (devenido tesorero) ya no pudo dejar de ver lo que no vio o no quiso ver durante tantos años. Algo similar a lo que le pasó a nuestro “estimado” Vicepresidente I.
Pero no, no profundizaré en estas realidades irrefutables sino que humilde, modesta y sencillamente le rogaré al colega informante del oficialismo que, en lugar de repetir anodina y aletargadamente (como lo viene haciendo desde el año pasado) todo lo que los 149 representantes restantes debimos haber leído y analizado antes de llegar acá, se preocupe, de ahora en adelante, en explicitar todos los puntos oscuros y/o dudosos y/o armados y/o inventados que figuran en cada movimiento económico o en cada presupuesto que se nos entrega.

Por ejemplo, y muy respetuosamente se lo planteo, me hubiera gustado que explicitara el aumento del pasivo del club ya que, sumando el corriente y el no corriente, totaliza la cifra de casi $ 235.000.000, o sea un 8,5% más que el del ejercicio económico anterior. Y, por supuesto, que lo desmenuzara. Porque no habrá escapado a Usted, ni a quienes los conformaron, que en el rubro “Deudas” del pasivo corriente (o sea de lo exigible en un plazo inmediato) ha habido un “interesantísimo” aumento del 25%, o sea la “insignificante” suma de aprox. $ 30.000.000. Claro, Usted podría refutarme diciendo que eso no es un problema porque podríamos hacernos cargo del mismo con los activos que el club ha contabilizado y que son los que nos han dado este superávit. El problema es que yo le respondería que en esos activos se encuentran los bienes de uso (estadio Monumental incluido), los documentos que cobraremos por la transferencia de los jugadores de nuestra cantera (como Lamela y Pereyra, por ejemplo), créditos de jugadores que se encuentran en el ámbito judicial (¿Usted nos puede dar la certeza de que ganaremos esos juicios?) y un rubro clave denominado “Diversos en moneda nacional y moneda extranjera” que suma aprox. $ 6.000.000 y que en el anexo IV, donde se lo detalla, no se han esmerado mucho en puntualizarlos correcta y claramente. Por lo tanto, va de suyo, que lo realmente exigible a River es más problemático (por la perentoridad de los plazos) que lo que River podrá cobrar con el tiempo; en ese tiempo donde entran a jugar la inflación local y la externa, las devaluaciones de las monedas internacionales y hasta las posibles quiebras o concursos de nuestros deudores (los invito a todos a repensar o a tener en cuenta lo que sucede en Europa en estos momentos). Pero, desde luego, la inventada o supuesta conversación entre Usted y yo terminaría a su favor cuando me pusiera la tapa diciéndome: “no se preocupe tanto, si total volvemos a vender 2 o 3 juveniles (entre otros, el 50% de Ocampos, en diciembre o en enero venideros), cubrimos lo exigible y encima les mostramos a todos los riverplatenses más superávit que nos permitirá continuar ganando el campeonato económico”. Yo, por mi parte, me quedaría pensando: “pucha, tiene razón, si generar o desarrollar otras ideas creativas y superadoras es impensable para esta Administración; no debería olvidarme que esta gente asumió sin ningún plan de gobierno y encima expresa la continuidad de la anterior, utilizando las mismas ecuaciones económico-financieras”. Por supuesto, colega, que Usted no tiene la culpa, sólo debe obedecer al dictador y a algunos más de su séquito. Y, además, ya ve… me ganó la figurada pero sana discusión.

Me permito disentir con los fiscalizadores oficialistas en el rubro Cobros por publicidad y concesiones. Si divido $ 32.847.549 por 12 meses me da un total mensual de   $2.737.296. Por lo tanto, y comparado con el ejercicio anterior, nunca pudo incrementarse en un 50% como ellos, ligeramente, lo afirman en su Informe. Queda, por el contrario, claramente expuesto el pésimo funcionamiento de lo que iba a ser la espada fundamental de esta Comisión Directiva para lograr muchos ingresos adicionales: el marketing y la venta, a nivel mundial, de la marca River. Ya no se le puede echar la culpa a la gestión anterior sobre los contratos comprometidos (y ya cobrados). No tengo dudas que la creatividad, las relaciones comerciales con el exterior y la penetración de nuestra marca en cada segmento de nuestra sociedad (con millones de hinchas en todo el territorio argentino) no han satisfecho las promesas de campaña. Si nuestro Departamento de Marketing no puede ingresar al Club más de $ 2.700.000 mensuales, independientemente de lo que viene dado inercialmente (T.V., a pesar del descenso, nuevos socios, etc.), estamos en un severo problema. Problema que se traduce en la poca o nula preparación profesional de los que tienen que llevarlo adelante.
También le pediría a los fiscalizadores oficialistas que tengan la amabilidad de colocar en sus cuadros y/o gráficos las cifras correctas de acuerdo a lo que reflejan los estados económicos.

                                                                             
                                                                                     

A propósito, ya que me refiero a ellos les comento, aunque mi opinión no tendrá valor alguno para los mismos, que no creo en los números que figuran como deuda financiera en el balance que tratamos hoy. Disculpen mi escepticismo en contraposición a vuestra jactancia en función del logro que esta Comisión Directiva ha alcanzado: la reducción de la deuda financiera. Es más, sería muy importante que le exigieran a la Tesorería que peleara por los intereses de River logrando obtener tasas más beneficiosas que las que figuran en la Nota 3 de este Ejercicio. También sería más honesto de vuestra parte que hubiesen incluido en su informe la triste realidad de haber cedido al Banco Credicoop todos los derechos, créditos, derechos al crédito y acciones de Petrobrás, Cabal, Visa, First Data Cono Sur para garantizar $ 14.300.000 en préstamos recibidos. Sería interesante que tuviéramos todos muy en claro la envergadura de las garantías otorgadas por un importe poco significativo para la dimensión económica de nuestra Institución. Claro, desde otro ángulo es entendible. Negado nuestro acceso al mercado crediticio con condiciones favorables en tasas y plazos (muerto el “invento” del fideicomiso y dándonos las espaldas las principales instituciones financieras de aquí y del exterior), es lógico recurrir a casi la única Entidad que nos “apoya”: el Credicoop, y darle a discreción lo que nos pide.

River ha pagado más de $ 68.500.000 en personal, haberes y cargas sociales. Sin contar los del fútbol profesional (un gran dibujo, por cierto). Queda evidenciado, lamentablemente, la sobrepoblación numeraria de personal que trabaja en nuestro Club. Y esto sí que es preocupante. Por los verdaderos trabajadores de nuestra Institución, por los reales (no los ñoquis), por los eficientes y dedicados a sus tareas específicas, por los de siempre, los de carrera. No por los “acomodados”, no por los “amigos de”, no por los “que conviene tenerlos tranquilos”, no por los “premiados” para hacer “trabajos especiales” y siguen las firmas. Los cálculos de varios profesionales vinculados al Club, y de otros que no lo están, dan como resultado que River Plate puede (y debe) manejarse con 500 (el análisis más optimista) y/o 700 empleados (el más pesimista), incluyendo al personal de vigilancia (no al del fútbol) y sin incluir los honorarios profesionales que suman $ 17.183.765. Dejo a consideración de los representantes, entonces, que realicen el simple ejercicio de dividir el primer importe mencionado por el monto del sueldo promedio bruto de mercado que Ustedes. elijan. Si de lo que resulte no se caen de espaldas, sus corazones funcionan a la perfección.

En otro orden de cosas, ¿observaron el importe que nos ha quedado por alquilar el estadio? ¿Lo analizaron detalladamente? Tan sólo aprox. $ 6.500.000 por los partidos de la Copa América, los amistosos de la Selección, la gran cantidad de recitales (¡y eso que lograron negociar mejores ingresos con las productoras de eventos artísticos!), etc. ¡Una verdadera bicoca! Estoy pensando seriamente en alquilarlo para el cumpleaños de 15 de mi ahijada…

Ahora bien, para ser honesto con todos Ustedes, debo confesarles que no me preparé para ser dirigente como sí lo hizo nuestro benemérito presidente. Sin embargo, y desde mi ignorancia formativa universitaria y mi escaso aprendizaje empresarial de 30 años a la fecha he tenido la suerte de haber leído, de casualidad, unos cuantos balances en mi vida y, perdónenme, tozudamente me sigo formulando observaciones debido a lo que no me cierra respecto de este Ejercicio. Es más, me parecen despectivas y despreciativas para con todos nosotros. De mi parte, les digo que hasta me siento subestimado. Paso a explicarles: si comparan las cifras del Ejercicio cerrado al 31-08-10, y aprobado por esta Asamblea oportunamente, con las cifras del mismo Ejercicio impresas en el Balance que hoy consideramos, encontrarán diferencias sustanciales entre lo consolidado el año pasado y lo que se nos presenta ahora. Por ejemplo:




Como podrán deducir de mis dichos, es irrisorio que la fiscalizadora oficialista hable de mayores egresos en el rubro Administración cuando habría que “felicitar” a esta gestión porque el importe que aprobó la Asamblea el año pasado, por este rubro, fue de $ 44.903.950 contra el modificado de ahora que asciende a $ 36.751.021 ($ 8.152.929 de un supuesto ahorro). Lo mismo ocurre en este compendio de desprolijidades contables con el rubro Seguridad y Vigilancia. La Asamblea aprobó la cifra de $ 7.274.362 y hoy nos muestran en el Anexo V, hoja 3, la cifra al 31-08-10 de $ 1.757.991 ($ 5.716.371 de otro supuesto ahorro). Si sumamos ambos importes, podríamos pensar que nos quieren hacer creer que estas correcciones favorecieron la capacidad de gestión de esta Administración en su lucha por sacarnos del pozo que nos dejó la anterior y mostrarnos, de esa manera, sus “éxitos” en el campeonato económico que quieren ganar, una vez que nos llevaron al descenso. Ni qué hablar de la fiscalizadora opositora que sigue sin cumplir con lo que el Estatuto le ordena. Aunque coincido en muchas cosas que contiene su Informe, me ha cansado leer sus recurrentes descargos lamentándose sobre lo que no le dan o quejándose vanamente para excusarse de sus responsabilidades. Definitivamente: ¡vayan a la Justicia (IGJ o fuero ordinario) y denuncien lo que sucede aquí adentro! Y, por favor, no maten al mensajero (o sea a mí) si no hacen lo que debieran hacer. No es nada personal contra ellos. Sólo les pido que cumplan sus funciones o las hagan cumplir a quienes corresponde por las vías que corresponden.

Supongo que el amigo Renzi, los miembros oficialistas de la Fiscalizadora (tan afectos últimamente a los gráficos elaborados para llevar agua a su molino y resaltar esta gestión) y hasta el miembro informante me chicanearán con que esas diferencias numéricas figuran en la Nota 4 (Ajuste a Resultados de Ejercicios Anteriores) o en la Nota 1 –Normas contables aplicadas- Subítem 1.2 –Criterios de exposición- Párrafo 2. Repito: supongo… Porque si lo hicieran, yo les respondería de inmediato que, tal como lo deja claramente explicitado la subsidiaria independiente de KPMG (la firma Sibille), “Dichos estados contables aún no se encuentran asentados en el libro de Inventarios y Balances”. A lo que yo agregaría: “no se ha dado cumplimiento a lo requerido por el artículo 281 de la Res. 7/2005 de la IGJ”.

Lo grave de todo esto es que cuando un balance se cierra y se aprueba, las cifras del mismo deberían, repito: deberían, ser inmodificables, definitivas y deberían coincidir en un todo con el Libro de Inventarios y Balances. Pareciera, estimados colegas, que luego de aprobar el balance 2010 se generaron modificaciones que no nos informaron y que pudieron haber producido alteraciones en dicho libro sin que nosotros la comiéramos ni bebiéramos. Pero como los socios y los asambleístas somos meras marionetas de los que dirigen al Club, deberemos acostumbrarnos a estas reclasificaciones de cuentas que acomodarán los rubros a piacere de lo que al oficialismo les convenga mostrarnos. Pero el error de esta gente es que las reclasificaciones contables no pueden alterar el resultado del ejercicio anterior (ni sus activos ni pasivos) y, sin embargo, los totales del activo, del pasivo y del patrimonio neto del ejercicio al 31-08-10 suman $ 239.528.721 cuando en el balance aprobado por esta Asamblea el año pasado sumaban $ 237.321.858. Dejo, entonces, el interrogante para quienes corresponda: ¿por qué o de dónde surge la diferencia de $ 2.206.863 resultante? Sería muy grave que los técnicos del oficialismo no pudieran responderla, ¿no les parece? 


Más pruebas: tienen en su poder el informe de Sibille sobre el Ejercicio 2011. Leamos el ítem 9, subítem a). Es factible, entonces, que además podamos ser burlados en cualquier momento ya que lo que aprobemos aquí puede ser modificado, sin pudor ni rubor alguno, conformando el libro de Inventarios y Balances con cifras distintas a las actuales y presentar ante la IGJ y la AFIP un balance diferente al que estamos tratando hoy aquí. No se horroricen por lo que mi mente inventa o por mis delirios. Lo que pasa es que yo no confío en esta Administración. Sólo estén atentos… por las dudas.

Señores, hasta aquí llego yo. El próximo paso es mocionar en este momento el rechazo al Movimiento Económico comprendido entre el 1 de setiembre de 2010 al 31de agosto de 2011 y pido enfáticamente a los veedores de la IGJ, antes de retirarme, que tomen debida nota de lo aquí expresado dada la seriedad del tema que nos ocupa.
Por último, aprovecho la oportunidad para intimar de palabra a la Comisión Directiva (representada aquí por su presidente y su secretario) para que convoquen a todo el mundo River (socios, agrupaciones, frentes, movimientos, filiales, notables, etc.) con el objetivo de alcanzar un acuerdo en común sobre la reglamentación del Derecho a la Información. Derecho clave que hemos conseguido 6 socios (entre los que me encuentro), después de una ardua lucha iniciada en el 2007, para abrir y flexibilizar el vetusto y perverso Estatuto que nos rige. Si continúa la omisión malintencionada de evitar dicho suceso (no olvidemos la sanción reciente que recibió River, por esta morosidad, de parte de la IGJ) la intimación será por escrito y con copia a ese organismo.

Balance cerrrado al 31-08-11

https://docs.google.com/document/d/1CFGvfRzfNNJKqaJAbWQ-BXf7gGYpSAKOkEROup_xqio/edit



















 
 
 









 
 
 
 
 
 




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